KAVAN:
Envié hace una hora a Eiden a comprar ya no me acuerdo ni el qué, sólo sé que era algo que no me hacía falta, pero necesitaba estar solo para preparar todo ésto.
A mí la navidad nunca me ha gustado celebrarla, además de que nosotros no creemos en nada de ésto, pero como mi caraid fué humano antes de que yo lo convirtiera hace ya unos meses, pensé que le gustaría vivir las fiestas que su raza celebra tan animadamente.
- Espero que le guste, creo que no me quedó tan mal el árbol.... –
Corriendo voy recogiendo todas las cajas que contenían los adornos navideños, las guardo en el armario donde tengo todo lo que no es de diario y me voy a la ducha para refrescarme y arreglarme antes que Eiden llegue a casa.
EIDEN:
Sinceramente no entiendo porqué necesita tan urgente recambios de la nespresso, pero sólo por haberme dejado salir a la calle solo, voy a buscar hasta una maceta si hace falta...llego a casa cargado con dos bolsas de recambios de café y subo a casa feliz por la libertad que ya empieza a darme...llamo al timbre porque no me dió las llaves y espero a que me abra la puerta del edificio puesto que a estas horas no está el conserje.
- ¡Ábreme soy yo amor! –
Entro en el edificio y subo por el ascensor como las personas ya que me gusta seguir siendo humano en según qué aspectos y llego a nuestro apartamento con una sonrisa por oler a pastel de manzana "mmmmm....alguien a hecho pastel de manzana". Llamo al timbre esperando que me abra y me miro en el espejo que hay justo al lado de nuestra puerta y me acomodo el cabello...Justo en ese momento él me abre la puerta y yo me giro con una sonrisa.
- ¡Hola cariño!!! Ya tienes aquí tu cafelito! –
Le digo con voz de niño y mirándolo con adoración y me acerco a él para besarle con dulzura y dejo las bolsas para poder abrazarle.
KAVAN:
Veo su preciosa sonrisa y siento lo contento que está por haber ido solo a la calle, aunque me cueste dejarle ir, sé que debo hacerlo, y poco a poco le iré dando más libertad.
Cojo las bolsas del suelo y lo vuelvo a abrazar arrastrándolo al interior a la vez que le doy la vuelta para que cuando nos separemos quede de espaldas al salón.
- Cierra los ojos amor......... –
Él me mira con cara de interrogación pero a la vez divertido, ya que sabe que me encanta jugar con él. Cierra sus ojos y yo dejo un dulce beso en ellos "no los abras hasta que yo te lo diga", le doy la vuelta y lo conduzco hasta ponerle frente al árbol y los paquetes que hay bajo él. Me coloco detrás suyo rodeándole con mis brazos su vientre y apoyando mi barbilla en su hombro.
- Abre los ojos Eiden..... –
Susurro en su oído, y cuando abre sus ojos, comienza a gritar como un niño, a pegar saltitos haciendo que tenga que soltarle. Miro como va corriendo hacia el árbol arrodillándose delante de él y acariciándolo como si no se pudiera creer que fuera de verdad.
- Pensé que te gustaría celebrar las navidades al igual que supongo que lo harías cuando eras humano. –
Digo con las manos metidas en los bolsillos del pantalón y sonriendo al observalo.
EIDEN:
¡No puedo creerme lo que estoy viendo! Una navidad especial para mí, cuando ya asumí mi nueva vida como vanirio, viene él y me regala un trozo de navidad...Me vienen a la mente esos recuerdos de la infancia cuando me despertaba emocionado y veía un árbol llenísimo de regalos...evidentemente todos para mí, puesto que yo era el pequeño en ese entonces y mi padre para comprar mi amor me rodeaba siempre de regalos...¡Qué inocente la infancia!
- Cielos no puedo creérmelo...¿ésto lo has hecho para mí? –
Le miro emocionado y se me llenan los ojos de lágrimas...Hacía mucho que renuncié a la navidad, ya como humano al morir mi hermano mayor odié toda fiesta que me recordara a él y pasé largos años viviendo en soledad estas fiestas por tener una familia totalmente rota y ¿quién lo pagó? ¡Yo! Vivía de la caridad de mis amigos que nunca permitieron dejarme solo en estas fiestas...siempre contra mi voluntad, pero siempre me dejaba llevar...Kavan me sonríe y se acerca a mí para abrazarme y me dice que ésto no es nada comparado con lo que es capaz de hacer por mí...que me entregaría su alma si pudiera y que lo único que quiere es que nunca más me falte de nada ni me sienta diferente.
- Gracias.. Es tan bonito todo ésto...Me has devuelto algo de mi humanidad que gracias a tí vuelvo a querer...Gracias. –
Le abrazo con alegría emocionado por completo y echo a llorar como un niño, pero ésta vez de felicidad y nostalgia pero agradecido eternamente a él.
KAVAN:
Abrazado a él dejo que llore todo lo que su cuerpo necesite, mis manos recorren su espalda dándole paz. La sala está en completo silencio, sólo se oyen sus sollozos, pero sé que son de felicidad, así que me quedo como estaba, abrazado, apoyado en su cuello y aguantándome también las lágrimas que amenazan por salir de mis ojos al sentirme tan feliz por lograr que él se sienta así de bien a mi lado después de por todo lo que le hice pasar.
Cuando sus sollozos se van calmando dejando paso a pequeños hipidos, me separo de él un poco para levantarle suavemente la cabeza y hacer que me mire. Veo sus ojos vidriosos y no puedo evitar besarlos capturando las últimas lágrimas que salen de ellos.
- Eiden.....amor.......sé que te iba a hacer ilusión, pero no pensé que echaras tanto de menos estas fiestas humanas....... –
Lo beso con suavidad, con amor y dulzura, degustando la sal de sus lágrimas en sus labios.
- Ven..........creo que santa claus dejó algo para tí esta noche...... –
Lo cojo de la mano para llevarlo junto al árbol y hacer que se arrodille a mi lado. Agarro uno de los paquetes y se lo entrego.
- Ábrelo.....espero que te guste.......si no te gusta, se puede cambiar sin ningún problema amor..... -
EIDEN:
Cuando veo la ropa me lleno de ilusión...siempre me han gustado los regalos y rápidamente me pruebo estas preciosas prendas que me ha elegido él con todo su cariño...Al ver que me queda bien le sonrío agradecido y acaricio su rostro abrazándole con fuerza.
- Gracias amor...muchas gracias, ¡es precioso de verdad! –
Le lleno la cara de besos entre risas de kavan y me dice que soy encantador y que sólo por verme así, se pasaría la vida regalándome cosas.
- ¿Por qué no me has avisado de ésto? yo no tengo nada para tí...¡no sabía que celebraríamos la navidad! –
Él se acerca a mí y vuelve a besarme y me dice que el regalo lo recibió cuando me quedé a su lado...que no puede pedirme nada más porque tenerme es un regalo de los dioses.
Me emociono al oir sus palabras y me caen las lágrimas.
- Jo Kavan en serio... no sé qué decir...Gracias –
Intento aguantarme las lágrimas apretando los labios y bajando el rostro hacia el suelo...Me cuesta mucho acostumbrarme a que mi vida ahora sea perfecta, a que sólo me pasen cosas buenas, jamás imaginé que la vida quisiera darme una segunda oportunidad cuando ya me creía perdido en ella.
KAVAN:
Poniendo un dedo bajo su barbilla, hago que alce su mirada de nuevo hacia mí, paso mis pulgares por sus ojos capturando las lágrimas que siempre derrama tan fácilmente y que a mí me encantan cuando sé que son de emoción y felicidad.
- Aún no he terminado con los regalos........toma.......éste también es para tí....No sé si es de tu gusto o no.....pero pensé que ahora que vas a salir más por tu cuenta....... –
Trago fuerte porque la idea sigue sin gustarme nada de nada, pero no puedo mantenerlo siempre encerrado en estas cuatro paredes, eso no es vida y menos para un vanirio.
- Podrás controlar más el tiempo si tenías uno de estos.... –
Él me mira con los ojos abiertos de par en par, no sé si lo que le ha asombrado tanto ha sido el reloj o lo que le he dicho, pero me encanta ver su expresiva cara, la cual no da lugar a engaños en ningún momento, ya que en el tiempo que llevamos juntos, nunca ha podido esconder sus sentimientos a la vista de los demás.
EIDEN:
Agarro el reloj con emoción y me lo coloco en la muñeca acariciándolo con dulzura...sus palabras han llegado a mi alma y me emociono al pensar que podré pasear por las calles y respirar aire puro en soledad...pero no quiero que piense que es lo que más deseo...lo que más deseo ya lo tengo, es estar con él y sólo con él consigo sentirme completo y no podré estar mucho tiempo solo en la calle sin él.
- Gracias mi amor...gracias –
Salto encima de él y lo abrazo como si yo fuera un koala agarrado a un árbol...beso sus labios agradecido y hundo mi cara en su cuello disfrutando de su olor a tarta de manzana, dejándole un húmedo beso en cada centímetro del mismo.
Él me abraza con fuerza y me mece como a un niño y me susurra lo mucho que me desea y que no va a parar de consentirme, que un día me prometió que me daría una vida perfecta...y realmente lo está consiguiendo...Mi mente no llora por mi familia, sólo siento deseo de estar a su lado y sólo de pensar que puedo estar sin él me aterra, en el fondo porque me sentiré inseguro.
- Quiero que sepas que no voy a poder estar siempre solo en casa y paseando solo por las calles...Yo te necesito Kavan...Tómate una vacaciones y quédate a mi lado una temporada...¡Por favor! –
Beso todo su cuello de nuevo y lo abrazo con deseo para que no me suelte de su amarre y sentirme protegido como sólo él sabe hacerme sentir.
KAVAN:
- Bueno.....pues tendré que ver cómo me las arreglo para que me puedan dar vacaciones para estar a tu lado. –
Cierro los ojos para disfrutar de sus besos mientras mis manos acarician su suave pelo.
- ¿Sabes que aún no se han terminado los regalos? aún queda uno más.... –
Le entrego el último paquete mientras sigue entre mis brazos, él lo coge y lo abre con rapidez.
- Espero que te guste............amor....... –
Hago que se apoye en mi pecho mientras acaricio su brazo tiernamente y él mira sus regalos, está tan hermoso con su rostro iluminado por las luces de colores del árbol "son mis primeras navidades y están siendo maravillosas gracias a tí".
EIDEN:
No tengo palabras...nunca imaginaba que podría volver a ser feliz una navidad y todo ha sido gracias a él, pero ahora me siento mal porque si llego a saber ésto podría haberle comprado el regalo que se merece y ahora siento vergüenza por no poder darle nada.
- ¿Por qué no me has dicho nada? a mí la excusa de que yo soy el regalo no me vale...necesito darte algo...jooo –
Pongo pucheros y él se ríe al verme y me come a besos entre risas, pero mi mente no puede dejar de darle vueltas al asunto...Pienso en como sorprenderle, en cómo puedo darle algo que cuando lo mire no pueda olvidarse de mí y miro mi muñeca y veo mi esclava de plata...Una esclava de plata que lleva toda la vida conmigo, fué un regalo de mi difunto hermano y para mí es lo más sagrado que tengo en esta vida y quien mejor que él para llevar la esclava que siempre me ha ayudado a vivir en los momentos duros...momentos en los que creía que me hundía y gracias a la luz de esta esclava conseguía seguir adelante.
- Se que ésto no es mucho pero... –
Empiezo a desabrocharme la esclava con los ojos llenos de lágrimas de la emoción...pero sintiendo como algo me libera de la carga del dolor por la pérdida de mi hermano...agarro la mano de Kavan y le miro.
- Quiero darte algo que para mí significa más de lo que te puedes imaginar...ésto que tengo en mi mano me lo regaló mi difunto hermano y es mi tesoro más preciado y ahora quiero que lo lleves tu por mi...para que me sientas cuando yo no esté y así me ayudes a luchar con mi dolor que nunca desaparece. –
Abro la lamo y dejo caer la esclava en su mano que permanece abierta y me seco las lágrimas que empiezan a caer por mis mejillas, bajando la mirada para coger aire y volviendo a mirarle con una sonrisa.
KAVAN:
Miro la esclava en mi mano abierta, levanto la vista hacia él y lo veo con los ojos anhegados en lágrimas pero con una sonrisa en la boca. Niego con la cabeza y cojo su mano colocando la pulsera de nuevo en ella pero ahora manteniendo mi palma junto a la suya con la esclava entre las dos.
- No puedo aceptarla......ésto es algo muy personal tuyo y yo no me merezco llevarlo........ –
Él me pide por favor que no la rechace, que necesita dármela. Siento su dolor en mi mente y no puedo negarme a su petición. Alargo mi mano con la palma hacia arriba y lo miro fijamente.
- Pónmela entonces amor.......haz tú el honor de colocarme tu bien más preciado en mi piel.... –
Con las manos temblando, me coloca la esclava en mi muñeca y cuando ya termina deja sus manos apoyadas en ella, como si quisiera sentir a su hermano por última vez en su piel.
Lo abrazo con mi mano libre y lo atraigo hacia mi pecho donde él se apoya sin apartar sus manos de mi muñeca, dejo un dulce beso en su cabeza y le doy su tiempo para despedirse.
- Te amo..... –
Susurro contra su cabello.
EIDEN:
Al colocar mi tesoro en su muñeca me vienen a la mente imágenes de mi vida...las risas con mi hermano, sus chistes malos, lo contento que me ponía con tan sólo verle...su presencia me llenaba por completo y su sonrisa me trasmitía amor, paz y alegría como nadie nunca había conseguido... Siento como me rodea con sus brazos y como me besa con cariño agradecido por este gesto, ya que sabe que es importante para mí.
- Sé que es una fuerte carga, pero sé que podrás con ella...ahora eres tu el que cuida de él....como haces conmigo. –
Sonrío al mirarle de nuevo pero las lágrimas caen por mis mejillas, siento que me falta algo, pero eso es una falta necesaria, tengo que dejar marchar a mi hermano y éste es el primer paso para que descanse por fin en paz y empezar yo a vivir mi vida.
Me seco las lágrimas y beso sus labios sonriente y me pongo en pie ofreciéndole mi mano para que se levante conmigo.
- ¿Bebemos algo? –
Kavan me dice que sí y voy hacia la cocina a preparar un par de claras, vamos, cerveza con limonada bien fresquita y vuelvo al salón para reunirme con él y ofrecerle un vaso...él me da las gracias y yo sonrío complacido, admirando su rostro que hace que se curen todos mis males.
- ¿Por qué eres tan guapo? -
KAVAN:
Hago que se siente junto a mí, sonriendo cuando me adula de esa manera.
- Ven aquí amor.........tú sí que eres guapo, hermoso, irresistible.....y no sé si hay algún adjetivo más que pueda englobar todo lo que tú eres para mí. –
Lo acerco hacia mí quedándome a escasos centímetros de su boca.
- Te amo demasiado Eiden........no sé qué haría con mi vida si tú no estuvieras a mi lado en todo momento...... gracias por estas primeras y maravillosas navidades.... –
Me acerco más hasta posar mis labios en los suyos y besarlo primero con suavidad pero luego ahondando más el beso sin poder evitarlo, un gruñido escapa del fondo de mi garganta al sentirlo tan cerca de mí, tan mío "quiero hacerte el amor Eiden......te necesito"
EIDEN:
Sus besos son como una cura para mí, la cura contra la tristeza, el dolor y la pérdida de toda una vida que sólo se ha dedicado a castigarme y a juzgarme...siempre tentándome para ir para el mal camino, hundiéndome para dejarme en lo más oscuro y no poder salir...pero gracias a mi fuerza que siempre he desconocido pude resurgir como el ave fénix y volver a empezar una vida plena, libre y llena de satisfacciones junto al hombre que más he amado en mi vida, el cual daría toda mi alma si fuera necesario.
Sus besos hacen que me estremezca y acaricio su cuerpo con anhelo deseando que nunca deje de tocarme de esta forma, que nunca deje de besarme como lo hace..." siempre estaré a tu lado y jamás nadie va a separarnos...te amo". Como si de una perfecta danza se tratara, nuestros cuerpos se adaptan a la perfección y pasamos horas amándonos sin importarnos nada más...sólo el deseo que nos une para toda la eternidad.
--------------Fin de Escena-----------------
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